Técnicas de relajación: Tips de cuidador a cuidador

Seas profesional o no, cuidar a una persona es una tarea sumamente agotadora.

Lo anterior no sólo se refiere a lo físico pues no sólo se trata del cansancio que pueda experimentar tu cuerpo, sino también a la parte mental y emocional, pues el tener que enfocar toda tu atención en una persona también puede producir estrés y agotamiento mental. Además, aunque de seguro estás consciente de lo importante que es descansar y relajarte, bien sabemos que en ocasiones no es tan fácil como parece.

Por tal motivo, te damos algunas técnicas de relajación con las que podrás sentirte y vivir mejor:

1. Incluye en tu rutina diaria un par de espacios cortos para “despejarte”: Aunque casi siempre nuestro pretexto es el tiempo, tampoco necesitamos varias horas para hacerlo. Basta con un espacio de 10-20 minutos al menos unas 2 veces al día (sobre todo cuando te sientas más estresado o sobrecargado) en los que puedas reflexionar, caminar o hacer alguna actividad que calme tu mente. Las aplicaciones para celular, audios y videos que te enseñan a meditar, respirar con calma o que te ayudan a relajarte, podrían ser excelentes opciones al tener opciones que puedes hacer en pocos minutos, restableciendo tu mente.
2. Procura hacer ejercicio; y no, no estamos diciendo que te metas a un gimnasio o vayas todos los días a un deportivo, pero procura hacer una rutina en la que el ejercicio sea parte de tu vida. Además, si te es posible ejercitarte en compañía de alguien será el doble de bueno pues no sólo trabajarás con los músculos de tu cuerpo, sino que lo harás con los de tu “corazón” al socializar con otras personas que te importan y a las que les importas.
3. No dejes de hacer las cosas que amas: Aunque sea de vez en cuando, es muy importante que disfrutes de la vida y hagas cosas que te gustan, te diviertan o te apasionan. SI puedes dedicarle al menos unos minutos todos los días sería excelente, de lo contrario procura dedicarle tiempo a eso que te llena mínimamente 1 vez a la semana.
4. Aprende técnicas específicas para afrontar la ansiedad o desesperación: Un psicólogo puede ayudarte con técnicas específicas de descarga emocional, resolución de problemas, así como de relajación basada en la imaginación, en la respiración, entre otras.

Recuerda que es tan importante que estés bien tú, como lo es que tu familiar lo esté.

¿Y tú qué haces para relajarte?

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